Sufrimiento humano

Saludos a la blogosfera!. Cuando tengo que llevar asuntos profesionales de gente cercana siempre me preguntan porque me decidí por esta rama del derecho en el que el contacto con el sufrimiento humano es lo más caracteristico. Es la especialización más dura sin duda pero creo que también la más agradecida, les contesto yo. Sí. Agradecida. Cuando todo ha terminado te queda una cierta satisfación que creo que no percibirá en la vida el que no trata con personas en apuros y se dedica a la fusión de empresas por poner un ejemplo.

Cuando vienen a verte o te llaman para consultarte algo, malo!. Como dice un buen amigo: Nadie va a un abogado de tu "especie" para decirle que las cosas le van bien!. O está metido en un marrón con pena de carcel o las cosas no le van bien en la pareja o ha fallecido alguien cercano y se están pegando por su herencia.

Esta semana pasada alguien cercano ha puesto fin a su matrimonio. Ha sido de mutuo acuerdo pero el sufrimiento es parejo al contencioso y la sensación de vacío y pena no se supera más que con el tiempo. Como ella misma decía, esto del matrimonio no trae garantía y hoy me tocó a mí.

Me viene a la cabeza un poema de Felipe Benitez Reyes:

Si alguna vez sufres -y lo harás-

por alguien que te amó y que te abandona,

no le guardes rencor ni le perdones:

deforma su memoria el rencoroso

y en amor el perdón es sólo una palabra

que no se aviene nunca a un sentimiento.

Así que cuando sufras -y lo harás-

por alguien que te amó, procura siempre

acusarte a ti mismo de su olvido

porque fuiste cobarde o quizá fuiste ingrato.

Y aprende que la vida tiene un precio

que no puedes pagar continuamente.