Ella rondaba los 40 y su corazón no latía como ella deseaba. En sus relaciones primaba lo físico y nadie había podido calibrar su ritmo de sístoles y diástoles. Él había rondado ya hace tiempo los 40 y venía rebotado de un mal matrimonio y había decidido no volver a amar.
Una amiga común, jugando a Celestina los puso en contacto. Al principio hubo reticencias pero empezaron a chatear. Se contaron lo divino y lo humano. Se fueron conociendo y antes de ni siquiera verse sentían algo especial.
La del corazón frío y el que había puesto en cuarentena su corazón, se habían enamorado... Y eso que se conocieron el próximo verano. Y lo que es la vida, el próximo verano iré al bautizo de su hija...
Feliz fin de semana!
viernes, 8 de mayo de 2009
El próximo verano
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4 comentarios:
Una muestra más de que el amor puede con todo... hasta con nuestra tozudez... =) Felicidades a los papás! Y felicidades a Tigre que se va de bautizo!
Vaya Tigre! pensaba colgar hoy yo esta canción.
Aunque mi interpretación es un poco distinta, lo que tú cuentas me ha hecho entender lo de "el proximo verano" de otra manera.
Buen finde!
No me puede creer que la santa madre iglesia (lo pongo en minúsculas ya que a mi entender no se merecen las mayúsculas) bautice niños de personas divorciadas, porque lo que Dios ha unido no puede separarlo el hombre (léase el señor juez, que también puede ser mujer), o puede que sea por no perder tanto personal en sus libros de inscripción y así poder seguir viviendo de la sopa boba estatal, y si es cierto que se cumplen los deseos espero que con el tiempo en algún próximo verano, a los niños no se les tenga que quitar ningún pecado, aunque sea alegando la presunción de inocencia.
nunca se deben perder las esperanzas porque no sabemos lo que nos vamos a encontrar a la vuelta de la esquina, enhorabuena para ellos.
por cierto estoy totalmente de acuerdo con yañez
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