miércoles, 7 de mayo de 2008

Los Tigres de Mompracem Capitulo 14


"Su voz adquirió un timbre dulce, melancólico. Habló de ella, de sus cabellos, de sus ojos, de su voz angelical que de modo tan extraño hiciera vibrar las fibras de su corazón. Pintó con acento apasionado los momentos pasados junto a la mujer amada, durante los cuales se olvidó de Mompracem.
—¿Creerás, Yáñez —dijo conmovido—, que en el instante en que puse el pie en la canoa, dejandola indefensa, sentí que se me desgarraba el corazón? Antes que alejarme de esa isla hubiera querido hundir en el abismo la canoa y a Giro Batol. ¡Hubiera destruido mi Mompracem, mis paraos, mis hombres, hubiera dado cualquier cosa por no haber sido nunca el Tigre de la Malasia!
—¡Sandokán! —exclamó Yáñez, con el ceño fruncido.
—¡No me digas nada, Yáñez! ¡Amo a esa mujer hasta tal extremo, que si me pidiera que renegara de mi nacionalidad para hacerme inglés, lo haría sin vacilar! ¡Siento un fuego que corre por mis venas, que me abrasa! ¡Creo que estoy delirando siempre, que tengo un volcán dentro del pecho, que me vuelve loco! En este estado deplorable me encuentro desde el día que vi a esa muchacha, Yáñez.
El pirata se levantó con un movimiento brusco. Dio algunas vueltas por la habitación, y después se detuvo ante el portugués, interrogándolo con los ojos. Pero éste permaneció mudo.
—No lo creerás —prosiguió Sandokán—, pero he luchado con fuerzas antes de darme por vencido. Mas ni mi odio por los ingleses ha podido contener a mi corazón. ¡Cuántas veces me asaltaba la idea de que si algún día me casaba con esa muchacha tendría que abandonar el mar y renunciar a mi venganza; perder mi nombre, perder mis tigres! ¡Procuré huir de ella, pero he tenido que ceder, Yáñez! Hasta ahora me había librado del amor, pero al fin me rendí ante ese cariño que nada será capaz de arrancarme del corazón. ¡Ah, Yáñez! ¡Creo que el Tigre dejará de existir!
—¡Entonces, olvídala! —dijo Yáñez.
—¡Olvidarla! ¡Es imposible, Yáñez, es imposible!¡Ni las batallas, ni las grandes emociones de la vida de pirata, ni la más espantosa venganza serán capaces de hacerme olvidarla! ¡Su imagen se interpondrá siempre entre todo eso y yo, y apagará la antigua energía y el valor del Tigre! ¡No, no la olvidaré! ¡Será mi mujer, aunque me cueste todo lo que soy y todo lo que tengo!"

4 comentarios:

PERLA dijo...

Tigre!!! sabes que no recuerdo casi nada de la serie, así que ¿cómo acaba la historia? Y tú, ¿cómo vas a acabar TU historia? Comida y alguna sopa en Polígono Vallecas, YA!!!

El Tigre de Mompracem dijo...

@ Perla
Este viernes tengo clientes a las 18,00 pero podemos quedar a comer o luego a cenar y a unas sopas
Esto sólo puede terminar en que acabemos casandonos tu y yo con Yañez de amante fiel!!!

yáñez dijo...

Ppero Tigre, como osas decirme esas cositas -le contesta el Cacho de cabrón de Yañez, sabiendo de que va este pirata-, a comer o a cenar, decídete de una vez que tengo perro y sí está vacunado, y además sólo seré amante fiel si el sexo es con AMOR (no el del barça), es a diario y no es obligatorio de lavarse todas las semanas.

Zorro de Segovia dijo...

cualquiera se mete en medio del trío. Sorteándose dos rabos, seguro que me toca alguno. AGGHHH!!!