jueves, 22 de mayo de 2008

El Tren


Saludos a la blogosfera!. Una bella historia de amor como las que se viven a diario. Son historias que a veces no llevan a ningún sitio pero que sirven para hacer felices a sus protagonistas. Sirven para apaciguar sus almas en este mundo que nos ha tocado vivir lleno de prisas y a veces sinsabores. Lastima que la mayoría de las veces el resultado sea el mismo. El no saber que...

"La misma hora, el mismo tren, las mismas caras. Él sube. Se sitúa junto a la puerta. Mira como cada mañana los rostros de sus compañeros de viaje y sonríe para sí. Él es feliz.

Ella espera en el mismo anden de cada día, se sitúa exactamente en el lugar donde el tercer vagón descarga a los pasajeros. Espera. Bajan. Suben. A ella le gusta ser la última.

Él aspira su perfume como cada mañana. NO SABE QUE ELLA HA DEJADO PASAR DOS TRENES POR VERLE

Ella, nerviosa, le mira. NO SABE QUE ÉL HA DEJADO PASAR DOS ESTACIONES POR RESPIRARLA. "

*Con el copyright de la buena de Carmen Iglesias

1 comentario:

yáñez dijo...

Pues como no le eche alguno de ellos un par de arrestos, se les pasará el tren, vamos digo yo que se puede provocar una leve colisión con rozamiento perrero incluido, que te miran mal, coño te acabas de ganar 10 minutos de más en la cama, que te miran bien pues acabas de ganar una (no se como definirlo) depende de la situación de cada uno???????