lunes, 22 de octubre de 2007

El hombre de la ventana


Saludosss corrdialess. Cuento popular para empezar una semana: Dos hombres, ambos muy enfermos, ocupaban la misma habitación de hospital. A uno se le permitía sentarse en su cama cada tarde, durante una hora, para ayudarle a drenar el líquido de sus pulmones siendo su cama daba a la única ventana de la habitación. El otro tenia que estar todo el tiempo boca arriba.

Los dos charlaban durante horas, de sus mujeres y sus familias, sus trabajos, su estancia en el servicio militar, donde habían estado de vacaciones, y cada tarde, cuando el hombre de la cama junto a la ventana podía sentarse, pasaba el tiempo describiendo a su vecino todas las cosas que podía ver desde la ventana.
El hombre de la otra cama empezó a desear que llegaran esas horas, en que su mundo se ensanchaba y cobraba vida con todas las actividades y colores del mundo exterior.
La ventana daba a un parque con un precioso lago donde patos y cisnes jugaban en el agua, mientras los niños lo hacían con sus cometas y los jóvenes enamorados paseaban de la mano, entre flores de todos los colores del arco iris.
El hombre de la ventana describía todo esto con un detalle exquisito y el del otro lado de la
habitación cerraba los ojos e imaginaba la idílica escena.
Una mañana, la enfermera de día entró con el agua para bañarles, encontrándose el cuerpo
sin vida del hombre de la ventana, que había muerto plácidamente mientras dormía.
Tan pronto como lo consideró apropiado, el otro hombre pidió ser trasladado a la cama al lado de la ventana. Se esforzó para girarse despacio y mirar por la ventana al lado de la cama... y se encontró con una pared blanca.
El hombre preguntó a la enfermera que podría haber motivado a su compañero muerto para
describir cosas tan maravillosas a través de la ventana.
La enfermera le dijo que el hombre era ciego y que no habría podido ver ni la pared, y le indico:
"Quizás sólo quería animarle a usted"
Es una tremenda felicidad el hacer feliz a los demás, sea cual sea la propia situación...

2 comentarios:

Zorro de Segovia dijo...

joder, joder, joder, qué tío, qué cabrón, amos que mentirle a un moribundo. ¡Mala raza!

yáñez dijo...

A mí me podía hacer feliz un ciego que me enchufara este viernes el cuponazo, pero con la serie que sinó,no sería una felicidad completa. No os preocupeis, que para vosotros tendría unas cañitas, y para mi compañera de habitación el 50%, que esto es por ley.